El COAS ha inaugurado este jueves la exposición “Nudos.
Con la Cabeza en la Mano” de Mar García Ranedo, una muestra en
la que subyace el interés por explorar formas de desdoblamiento
identitario que nos puedan revelar los nudos y los conflictos a los
que nos enfrentamos en la construcción del nuestro propio relato.
En este proyecto expositivo, donde se combinan
fotografías y dibujos, están latentes dos propuestas conceptuales. Por un
lado, la idea de desmantelar fronteras entre los lenguajes a través
de la conversación entre la fotografía y el texto, lo sensible y lo
especulativo como convivencia fluida. Por otro, la proyección del cuerpo
como rastro del pensamiento, el gesto de imprimir la huella del cuerpo en
el proceso o acto de dibujar.
El dibujo pasa por la mano antes de desatarse con fluidez
sobre el papel y organizarse como un código dispuesto a ser descifrado. Pero
antes de todo está en la cabeza, comienza en el pelo. El pelo es la metáfora,
el lugar por donde fluye el pensamiento, el principio de todo. Con sus Nudos.
Con la Cabeza en la Mano.
Juanma García Nieto, vocal de Actividades del COAS, indicó que “es un placer presentar esta exposición
que, como muchas de las que aquí acogemos, tiene su pequeña historia. En 2022
acudí a una exposición bajo el título “Sobre el papel”, donde había multitud de
artistas de gran reconocimiento, muchos de ellos ya consagrados como Soledad
Sevilla, Juan Suárez, Eva Lootz, Cristina Iglesias y, entre aquellos artistas, estaba
la obra de Mar García Ranedo. Me llamó mucho la atención porque, de repente, mediante
un dibujo con rotring, creaba espacios casi orgánicos, como una especie de
arquitectura ficticia, muy sugerente. Además, aparte de su obra plástica, trabaja
la fotografía urbana en entornos cercanos
y reconocibles, con textos de la propia autora, en una suerte de mapa urbano en
el que el texto sugiere significados y genera situaciones cercanas, imaginadas,
irónicas, relacionadas con la fotografía que acompaña”.
Por su parte, Mar García Ranedo, explicó que es “una exposición que se articula
en dos niveles, no solo en el sentido físico, planta alta y planta baja, sino también
en un sentido conceptual en el que esas textualidades presentes en el dibujo,
la fotografía y el texto, realmente no funcionan como una simultaneidad, sino más
bien como una cohesión, intentan generar un discurso único y cohesivo. Mientras
que el pelo y el dibujo del pelo se centra en el cuerpo, en cómo se transita el
cuerpo, en cómo algo que sale del cuerpo se convierte en otro cuerpo, un cuerpo
gráfico que encuentra en el papel ese espacio en libertad donde se generan
situaciones azarosas y evita trasladar cualquier tipo de orden representativo. Es una sensación de trabajar desde lo introspectivo para generar un estadio
extraordinario y articular ese orden discursivo de cómo el cuerpo actúa en ese
espacio de libertad en blanco creando ese trazo de línea, bucle, pliegue como
estructuras afectivas y emocionales".
Además, detalló que "en la planta baja podéis ver cómo
la fotografía y el texto se articulan y, de alguna forma, es algo mucho más
reflexivo. Las palabras parapetan, constriñen, limitan y no
tienen esa sensación de desplazamiento infinito que el dibujo tiene. Pero
ciertamente se complementan porque el cuerpo de imágenes que se articula desde la
fotografía está habitado fundamentalmente por un cuerpo de mujeres del entorno
urbano. A través del texto procuro desmontar esas artimañas en las que el propio
sistema las ha englobado para desmontar los estereotipos y los tópicos que se
les presuponen. En cierto modo creo que la fotografía y las palabras son poderosas
armas desmitificadoras, canales importantes para poder denunciar y construir
conciencia. En ese sentido creo que en la parte de abajo es una línea en la que
podéis ver más recogimiento y reflexión”.
Por último, Mar concluyó comentando que "la exposición podría considerarse
como una reflexión en torno al concepto de la identidad en relación casi a tres
niveles: el corpóreo y el social, que nos vienen dados por el propio sistema,
por lo que estamos constreñidos y no podemos hacer nada; y el reflexivo, el único
que nos queda para poder encauzarnos como seres independientes".
La muestra, con la colaboración de LAB, estará abierta al
público hasta el viernes 7 de marzo en la sede del Colegio (Pl.
Cristo de Burgos, 35, Sevilla), de lunes a viernes, de 9-14 h., y las tardes de
martes y jueves, de 16-20 h.
Mar García Ranedo
La artista Mar García Ranedo vive y trabaja en Sevilla. Es
artista visual, investigadora y docente en el Departamento de Dibujo de la
Universidad de Sevilla. Doctora en Bellas Artes, realizó sus estudios de artes
en la Universidad de Sevilla y la Heriot Watt University de Edimburgo.
Su trabajo ligado a la producción artística se ha centrado
en el análisis de las estrategias de representación en torno a la mujer que
gesta, construye y establece formas de identidad y arraigo. Cuestiones
relacionadas con el cuerpo, el deseo, lo inadvertido, lo fortuito, lo
enmascarado y lo inextricable operan de forma latente en la estructura
narrativa de sus obras.
Imágenes: María Cano y Candela González